Lluvia de agosto es un proyecto que he pensado a partir del haiku. Realizo composiciones con elementos que pertenecen a diferentes ideas de proyectos en proceso y a manera de experimentación. Me propongo orquestar, bajo una sola línea, problemáticas sobre la materia, el paisaje, la vida cotidiana y la experiencia personal. El motivo surge de una fascinación por los espacios baldíos y camellones que se inundan salvajemente con maleza en épocas de lluvia.
En especial, me interesa un tipo de maleza en específico: la manzanilla bastarda, que siempre se encuentra vulnerable, creciendo y muriendo constantemente. ¿Vieron amores perros?, pienso que aquí es similar, pero imaginen que en lugar de perros hay manzanillas bastardas y lluvia. Me interesa trabajar con la memoria y huella de objetos y situaciones; crear indicios, telepatía y espacios de lectura y comunicación.